Si hay algo que puede aplacar el flagelo de la soledad, es un novio de domingo.
Sí hay algo, además de ir a la iglesia (?), que hay que hacer los domingos, es cucharita.
Si hay algo que es mejor hacer de a dos, y en domingo, es mirar una peli (para tener con quien discutirla)
Comer helado y morsear, dormir siesta, y tener mucho sexo dominguero.
El resto de la semana se puede dedicar a los amigos y a la rutina. Pero no hay nada más energizante para terminar/empezar una semana que pasarla haciendo fiaca... de a dos.
Creo que no estoy, todavía, con la cabeza bien abierta para empezar algo de cero y dejarlo ser. No me puedo aventurar en una relación para ver que onda. Necesito más, o necesito otro...
Pero el novio de domingo... eso es imprescindible. Si después se extiende a toda la semana o llama por teléfono o escribe cartas de amor, ese es otro tema. Encontrar a un hombre, manteniendo una relación sincera y clara, con los papeles al día, digamos, con quien poder compartir la tristeza del domingo a las 7 pm y transformarla en chistes, juegos y chocolate. Eso sería la gloria de la soltería.
Y ahí sí. Ya estable, con el alma menos vencida, abrirse para algo más...
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3 comentarios:
Helado, película y siesta. Me conformo con esos tres nomás, y si me despierto y todavía es domingo, entonces más helado, más película y más siesta.
sachiel sos el mismo sachiel de siempre? el sachiel de #canaldondenosconocimostodos???
que zarpado
y si...la amargura dominguera con lo unico que se puede combatir es con una buena compañia (y)
El mismo.
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