domingo, 31 de mayo de 2009

Domesticar

Una y otra vez lo leí. Lo abracé y acaricié sus páginas. "una guía para la vida".
Me acompanió (perdón pero no tengo enie) en esos horribles momentos de angustia donde lloraba por horas y no sabía porqué. Me ensenió muchas cosas que no terminaba de aprender porque caían en lo abstracto. Me modeló, de alguna rara forma, lo que soy y lo que me gustaría ser. Lo que veo de las personas."A las personas mayores les gustan las cifras.(...) Nunca se les ocurre preguntar: de que tono es su voz? (...)"

Sus ensenianzas me llegaron tarde. No importa que este escrito como maravillosas metáforas o que el viento te lo escupa en la cara o que lo lleves tatuado en los brazos. No se aprende de los libros. Nunca. No hay forma.

Se aprende de la vida y los libros nos dan lentes para poder ver al mundo con distintos colores y formas. Pero hay que salir, soniar, entender y amar al mundo.

El salió a recorrer planetas para descubrir que lo que más queria en el mundo (su rosa) estaba en su casa.
Y habló con gente y conoció y juzgó y aprendió. Aprendió que su rosa era especial por todo el tiempo que le había dedica. Que su rosa era mucho más hermosa que todas esas rosas ordinarias.

"eres responsable, para siempre, de aquello que hayas domesticado"

Confieso, Culpable. He usado esta frase para "chamuyar". Y funciona.

El problema es que a veces necesitamos que nos domestiquen, concientemente, a nosotras.

Que alguien se preocupe por forzarnos a ponernos contentos del sólo compromiso de verlo. (Si vienes, por ejemplo, a las cuatro de la tarde; desde las tres yo empezaría a ser dichoso)

Zorras les dicen a las mujeres... será porque nos dejamos domesticar por los hombres? porque queremos ser únicas entre millones? porque queremos que lloren cuando nos alejamos? (Y cuando te hayas consolado (uno siempre termina por consolarse) te alegrarás de haberme conocido)

Pero muy pocos logran convertirnos en sus rosas. Muy pocos viajan kilómetros para buscarnos porque nos dejaron desprotejidas y no tenemos espinas.

No era más que un zorro semejante a cien mil otros. Pero yo le hice mi amigo y ahora es único en el mundo...

lunes, 25 de mayo de 2009

Obsesiones

Necesitamos, a veces, pensar en alguien, en quien sea. Salimos a bailar y torpemente entregamos nuestro número a alguien, para poder pasarnos una semana esperando que suene el teléfono. Limitamos nuestros pensamientos y nuestro sufrimiento a un hombre -con o sin nombre-, para que nos llene de fantasías.
El mundo exterior nos llena de golpes, las crisis mundiales son cada vez más profundas y abarcativas, no hay lugar adónde correr. No hay estabilidad sobre la que proyectar algo.
Sin perspectivas laborales, de desarrollo o la concresión de un mínimo proyecto -mínimo- lo único que nos ampara es el deseo de encontrar a alguien que nos sujete de la mano mientras nos hundimos, para no ahogarnos.
No es que nos enamoramos fácil, sabemos perfectamente que eso no es amor. Pero es una salida, un escape. Nada como pensar en ellos, para no pensar en nosotras. En esa nube que se aparece cuando dibujamos un futuro.
En un mundo sin respuestas, soñamos con alguien que le interese -o al menos finja- escuchar nuestras preguntas.

jueves, 21 de mayo de 2009

Bridget...

BAsta de Daniel Cleaver! Exijo mi MArk Darcy!!!!!!!!!!

"I need something more spectacular than this..."

lunes, 18 de mayo de 2009

Lenguaje

Según el Espasa-Calpe
Desahuciar:
tr. Quitar a uno toda esperanza de conseguir lo que desea:
siento ser yo quien te desahucie de tus fantasías.
Considerar el médico que un enfermo es incurable:
le desahuciaron sin atender a más pruebas.
Despedir el dueño de un piso, local o finca a su inquilino mediante una acción legal:
lo van a desahuciar por falta de pago.
♦ Se conj. como cambiar.


Más claro, hechale agua. O vodka...

domingo, 10 de mayo de 2009

Limpieza

Ordené. Escondí las cosas feas en el placard y limpié las que quedaron afuera. Hice la cama. Barrí. Puse los almohadones que no había puesto hace tiempo. Limpie con fuerza. Despeje la cocina y mis ideas. Borré las nubes de tristeza y abrí las alas. Removí la tierra del balcón, olvidado por el frío y el deshuso. Removí la tierra de mi alma, por la misma razón olvidada. Saqué las ranas y las pusé para que me alegren la vista. Pusé música que no escuchaba hace tiempo y bailé con ganas. Despegué y salí. Y volví al rato. Y que comodidad. Disfrutar del ambiente. De la intimidad de mi casa. de Mi.

Mañana va a ser una noche especial. Algo me dice que si. Tengo otra vez una cita conmigo. Un plan, un whiski, una serie (o dos), algo para comer y los brazos abiertos esperando para abrazarme. Quizás, si la paso bien, nos quedemos charlando y tomando café con un cuadradito de chocolate amargo.

Le estoy tomando mucho aprecio a esta persona. Y creo que no es apresurado pensar en compartir toda mi vida con ella. Nos reimos juntas, lloramos, nos abrazamos y nos contamos secretos. A veces nos peleamos, pero no duran mucho esas peleas. Las reconciliaciones son increíbles. Perdonarse los errores y reconocerlos es una de las mejores cosas que hacemos juntas.

Así que mañana la voy a recibir, con la casa ordenada. Y quizas hasta prenda unas velas...

miércoles, 6 de mayo de 2009

Time

-"No llores, todavia hay tiempo"

No, no hay tiempo para nada. Ya es tarde. Siempre se me hace tarde. Ya metiste a otras personas en la cama. Ya me quiero ir.

No, no me quiero ir. Quiero perpetuar este momento. Es inmesurable la forma en que uno disfruta algo que se esta por acabar. Como si el cerebro sólo pusiera atención en eso. Cómo si dejara de respirar.


Pero me voy, y me fui y todavía queda por ver si tengo fuerzas para volver. Porque volver implica, entre otras cosas, decir muchas cosas que no se dijeron y soportar oir muchas que no se si quiero oir.

Odio tener que tomar decisiones. Odio tener que decir lo que siento, especialmente en momentos en que no se que carajo siento. Odio que mis pasiones tomen la rienda de mi razón.

Y aún así, a pesar de todo estoy contenta. Conmigo.

sábado, 2 de mayo de 2009

Cita...avec moi

Fue una tarde especial... podría haberme ido a que me hagan unos mimos y unos mates... pero decidí quedarme en casa...limpiarla y limpiarme. Respiré hondo y acomodé, tiré, guardé. Me teñí, me bañé. Me abracé y lloré un poco conmigo...

Preparé una lista especial de temas y me agarré fuerte de la mano... y esa tarde... me saqué a bailar.

Y nunca fui tan feliz bailando conmigo... Y me sentí hermosa... y completa. Y no necesito nada más que lo que yo puedo darme. Todo lo demás incremente y acompaña el placer de estar...conmigo.